Wednesday, July 29, 2009

Ir de boda




Lo supe instintivamente. Y es que el atún de la ensalada no presagiaba nada bueno. Tras su rápida expulsión al plato de una amiga, construí un fuerte o una zona 0 que, desgraciadamente, tuvo como víctimas a los maíces. Con lo que a mi me gustan...

Salvo mi solidaria amiga y su marido, el resto de los comensales, alucinados con el hecho (al parecer, insólito) de contar con una vegetariana en la mesa, comenzaron, por asociación mental, a rescatar “personajes gastronómicamente excéntricos o rarosos” de su memoria: que si una macrobiótica obsesiva-compulsiva que pesa todo lo que come y nunca se pasa ni un gramo, que si otra tipa con fobia a los gérmenes que sólo come lo que ella cocina y se lleva su propia food a los restaurantes, que si el primo del amigo de Murcia que es crudiriano y hare krishna y un día casi muere atragantado por una nuez de macadamia rancia...

“Somos la mesa de los raros” susurró mas que pronunció una frágil y aniñada mujer a dos asientos de mi. “¿Y eso?” increpé. “Tengo alergia a cualquier tipo de hongo y no podré comer el primer plato. Soy rara”, añadió. “Perdona, pero especial y raro, no es lo mismo” contraataqué. La frase quedó flotando en el aire, como un globo que hubiera inflado y atado a mi silla para que todos los presentes pudieran verlo. Desgraciadamente, no lo vio nadie.

Llegó el mencionado plato de hongos variados con ibéricos para la gran mayoría y sin “oinks” para mi. Para entonces, yo ya estaba llena (comer como un pajarillo y beberse 3 vasazos de agua tuvieron algo que ver). Pero el gran número aún no había hecho acto de presencia. Como de todos es sabido, el 3 es la estrella, ya que a la tercera va la vencida. El camarero, descaradamente, me sirvió la misma merluza ensalsada que al resto. “Perdona, pero no como pescado”. Cara de estupor. “Soy ve-ge-ta-ria-na”. Cara de estupor en Panavision que fue interrumpida por un “bueno, pues ya te improvisaremos algo”. Y vaya si lo hicieron. Tuve el honor de degustar un plato que sólo se come un lunes por la mañana tras un fin de semana de excesos gastronómicos y alcohojiles, cuando estás en plena operación bikini, el medico te ha prohibido la sal y te duele el metacarpo del pie izquierdo: verduras al vapor. Las reacciones no se hicieron esperar. Mientras el comensal de la izquierda lo saludo con un “¡Ah, bieen!”, la de la derecha, pronunció con indignación un “¡No me puedo creer que te hagan esto!”. Me comí un par de judías y deje el resto en señal de protesta.

Cuando me trajeron el risotto, no sólo había perdido total y absolutamente el apetito, sino también la fe en la humanidad. Minutos después del postre, en su ronda relámpago por las mesas, la novia me hizo la pregunta de rigor y no fui capaz de mentirle, la aprecio demasiado:

- ¡Me han servido pescado!
- ¡No me digas eso!¡Pero si llevo meses repitiéndoles lo que comías y lo que no!
- Lo se, Sil, lo se... Ea, ea, ea, ea...

[Pic del risotto misterioso]

13 comments:

  1. jaajajjaaajja....la historia de mi vida!
    es asiiiiiii...
    "soy vegetariana"- "bueno, pero algo tienes que comer" (te responden)...
    me hubieras avisado y en vez de ir a esa boda, te venias a comer una pizza conmigo!(casera y bien sana!)
    Maravillosamente relatado...un placer leerte...

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  2. ¡JAJAJAJAJAJAJA!!!!!!!!! Me jode, es más, LO ODIO PROFUNDAMENTE, cuando, por no comer ciertas cosas, la gente en las mesas de bodas empieza a preguntarte tonterías en plan "Ah, ¿pero no comes carne?" o a decirte cosas en plan "Pues no sabes lo que te pierdes si te dejas el jamón"...

    AAAAAAAARGH!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

    Te comprendo perfectamente, y es que es cierto que España está super mal preparada para los vegetarianos. En otros países te habrían puesto platos vegetarianos "de verdad", te habrían puesto seitán, o tempeh, o humus, o algo así. Pero esto es España, y en España los vegetarianos "sólo comen ensaladas", y punto pelotas.

    REAAAAAAAAARGH!!!!!!!!!!!!!!!

    Pero en fin, son las bodas...

    PD: Tienes que hacer otro post algún día sobre la música de las bodas, dícese reaggetton del peor, éxitos de King África de hace cinco veranos, flamenqueo puerco estilo Estopa o flamenqueo puerco estilo "Tus ojos bandidos", música casposa estilo Julio Iglesias o música rociera cutre XD

    Ea ea ea!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

    XP

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  3. eh, eh, que yo paso por aquí cada vez que tú actualizas... no me pongas falta en la lista!!!

    No me puedo creer que, si de verdad tu amiga les avisó de que iba a haber comensales vegetarianos, hayan pasado así del tema. Igual es que se les olvidó, y luego con hacerse los tontos ya está bien la cosa... tampoco puede ser tan difícil hacer un menú de boda sin ingredientes animales.
    ¿Sabías que la reina es vegetariana y que, allí donde va, hay menú veggie?
    En cualquier caso, muy bien escrito... y muy rara la pinta del ¿risotto?

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  4. pobre, si es que ser vegetariano parece que se considera ser raro. no sabia yo eso

    paciencia niña jejejejee


    un beso

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  5. Un relato muy gracioso, jeje, tienes que ir a mas bodas para que nos las relates después...tu lo pasarías mal, pero tus historias siempre son graciosas.
    Lo que se sale de lo "normal" o establecido siempre atrae miradas, pero tú a lo tuyo.
    Un beso!!

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  6. Agrego una pregunta:
    ¿Por qué siempre se baila el Bals?

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  7. jajajaja, venía de tu otro blog preocupada por el tema de que besas mal y pensando "ay pobre, por qué dirá esas cosas?" Y me he tronchado con el relato de la boda. Es que eso de las bodas, para mí, es como una carrera de obstáculos, empezando por los comensales que te tocan en la mesa, pasando por el vals y terminando por las tonterías que se escuchan al final (si es que resisto hasta el final). Pero tú has salido muy airosa, jajajaja
    Un beso enorme.

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  8. Ay! veo que somos muchas muchas muchas... y muchos... que cansinos Xd!!!! pero y que comes como tu siguiente post?... no es que me alimento del aire... respondo a veces... cuando estoy harta de excusarme y dar explicaciones. Joder! si son ellos los que matan para comer, porque somos nosotros los que tenemos que explicarnos... Yo ya cundo voy de boda exigo mi menu, si no que los novios se olviden de regalo... no te jode!!!!!!!!!!!

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  9. Me alucina y mucho que hoy dia la gente no entienda lo que es ser vegetariano y sobre todo no lo respeten.

    Desde luego se deberian dar unas cuantas clases mas de respeto al projimo en el cole o instituto porque la gente no entiende lo molesta que puede llegar a ser..o mejor dicho irrespetuosaa...

    Espro que en la siguiente boda, tanto el menu como los invitados no sean tan metiches!

    besoss

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  10. Desde luego el relato es extraordinario. Tienes un don para contar las cosas. Me he reido mucho, a pesar del trasfondo triste de la situación.

    ¡Besos hervidos al vapor!

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  11. Joe, aún tuviste suerte... Mi primera boda de vegeta fue hace poco, y si hubieses visto la TRISTE ensalada de plato principal que me pusieron...
    Se creen que por no comer animales no nos alimentamos...

    Así acabé, en-paná perdía...
    Espero tener más suerte la próxima vez.

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  12. que grande tu blog!!! :)))

    Yo soy vegetariana desde hace 10 años y no tengo nadie más a mi alrededor pero por suerte tengo unos amigos geniales que siempre me tienen en cuenta cuando hay que comer en grupo y se lo curran mucho, para que negarlo. En los menus de cenas organizadas en los restaurantes, últimamente me niego a ir si no me aseguran que voy a tener un menú digno. Me niego a pagar lo mismo que todos por un cacho de tomate y una lechuga mal cortada!

    Odio la frase: ah, pero seguro que te pueden hacer una ensaladita. Señores, quiero comer, no estoy a dieta!

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  13. Jajaja. Totalmente identificado y además tengo una boda el sábado. No se ni quiero imaginarme lo que me espera, porque aun habiendo advertido previamente a la novia del riesgo latente del pescado o marisco, siempre me queda la incertidumbre de que incluyan alguna salsa o cualquier cosa rara. Eso sin hablar de los comentarios que me quedan por oir.

    Una vez me pasó una cosa que puede que no sea grave pero es muy significativo y me hizo sentir un poco mal: en la puerta de una pizzería por la que pasé, había una pizarra con las pizzas de la semana, en la que reflejaba una vegetariana. Entre y le pregunté a la camarera.
    Respuesta: ¿Dónde has visto eso?
    Tras salir a mirar la pizarra me dijo que iba a preguntarle al cocinero.
    Evidentemente me fui.

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