
Durante mi año largo como activista, tratando de rescatar animales abandonados o víctimas de esos campos de concentración llamados perreras, he acabado elaborando toda una antología de los horrores del abandono o, también llamada “colección de excusas para abandonar a un amigo”.
¿Están bien sentad@s en sus asientos? Con mayor o menor nivel de crueldad y originalidad, las excusas son:
- Vamos a poner tarima flotante
- Es feo
- Me he quedado en paro
- Voy a marcharme a otro país
- No es de pura raza
- Estamos en crisis
- Tiene diarrea (dicho por un ciego que abandonó a su perro lazarillo en la perrera tras 10 años, sin molestarse en averiguar que un simple medicamento lo solucionaría)
- Ya no tengo dinero para darle de comer
- No tengo suficiente espacio en el coche
- Es negro (dicho sobre un cruce de persa precioserrimo)
- Es de mi madre/padre. Ahora va a entrar en una residencia donde no le dejan tener mascotas y yo no lo quiero
- No quiero darle la pastilla todos los días
- Vamos a cambiar el suelo
- Es viejo
- Trabajo muchas horas y estoy muy cansado para pasearlo cuando llego a casa
- Es viej@ y ya no juega con los niños
- Me he mudado a un piso donde no admiten animales
- Voy a tener un hijo
- Quiero sacrificarlo porque me he separado de mi pareja y no quiero nada suyo
- Hace sus cosas fuera de la arena (una fractura lo explicaba)
- Me he ido a vivir con mi pareja y es alérgic@ a los perros/gatos
- Nos lo dejaron y no lo queríamos
- Tiene celos del bebé
- No se adapta (dicho después de uno, dos días y, a veces, incluso, horas después de su adopción)
- Mi pareja y yo nos separamos
- Su dueño era un familiar que murió y yo no lo quiero
- Suelta demasiado pelo
- No se llevaba bien con el perro en el coche (entregado a los 45 m de ser adoptado).
- No hace juego con las cortinas
- Quiero irme de vacaciones
- Vuelvo a casa de mis padres y no me dejan tener animales
- No quiero pagar su operación/tratamiento
- No se lleva bien con el gato/perro de mi hijo/pareja/padre/madre
- Se ha quedado preñada
- Ya no lo puedo atender (dicho a los 2 días de su adopción)
- Se ha hecho grande
Me encantaría asegurar que much@s de est@s abandonadores/as sin escrúpulos han pagado un precio psicológico, social o económico por tan vil y despreciable acción, pero la triste realidad es que, en la gran mayoría de las ocasiones, los integrantes que componen nuestro cáncer social, como especie, salen de rositas. Las únicas víctimas, una vez más, siguen siendo los más vulnerables.
Se acerca la estación de los horrores para todos los que amamos a los animales.
Queridos subhumanos que abandonáis a vuestr@s amig@s y l@s condenáis, en la mayor parte de las ocasiones, a la muerte,
A pesar de ser consciente de que la justicia cósmica no existe y de que no siempre se cosecha lo que se planta, os deseo lo peor que se le puede desear a un sádico maltratador: conciencia, sensibilidad, empatía, autoresponsabilidad y culpa. Que un ser querido os abandone en un futuro más o menos cercano y padezcáis enormemente por ello, no es suficiente...
Atentamente,
Alhy.
P.S. La foto ha sido tomada en Tenerife esta semana y pone los pelos de punta: 9 gatos abandonados en 5 transportines. Resulta difícil creer que esta nueva vuelta de tuerca a la crueldad haya sido obra de una sola persona. ¿Las quedadas entre abandonadores vacacionales se convertirán en tendencia?