"Nuestra economía tan productiva requiere que hagamos del consumo nuestra forma de vida, que convirtamos en rituales la compra y el uso de bienes, que busquemos la satisfacción espiritual y de nuestro ego en el consumo. La medida del estatus, de la aceptación social, de prestigio, se encuentra ahora en nuestros patrones de consumo. El verdadero sentido y significado de nuestras vidas está expresado en términos consumistas.
Cuanto mayor sea la presión sobre el individuo para que acceda a salvaguardar y aceptar los estándares sociales, mayor será su tendencia a expresar sus aspiraciones e individualidad en función de la ropa que lleva, lo que conduce, lo que come, su hogar, sus hobbies.
Necesitamos que las cosas se consuman, quemen, reemplacen y desechen a un ritmo cada vez mayor. Necesitamos que la gente coma, beba, piense, vista, conduzca y viva a un ritmo de consumo más complicado, y, por lo tanto, más caro".
Victor Lebow, economista (1955).
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Genial. Y lo peor es que ha ido a más con el tiempo y en estos momentos intentan hacernos, a pesar de la crisis esta asquerosa, aún más consumistas de lo que ya somos.
ReplyDeletePero las cosas se pueden cambiar. Y cambiarán porque han cambiado otras cosas en el pasado. Ya lo dijo Al Gore: ¿Quien esperaba que hubiese una Revolución en Francia que acabase con el antiguo régimen? Pues la hubo.
Se puede.
Y joder, el mundo musulmán lo está demostrando. Cuando el pueblo quiere, todo se puede.
¿Qué tal ha ido el finde? Se te quiere :)
creo que hay cosas con las que estoy de acuerdo y otras no. sería largo de explicar.
ReplyDeleteestoy de acuerdo en que hemos llegado a un nivel de consumismo brutal e innecesario. pero ahora mismo, según como está montado el sistema, la solución es bastante compleja. si dejas de consumir las empresas cierran y la gente va a la calle. o sea, que es una espiral ascendente difícil de cortar a menos que se produzca una revolución como la que hablaban en "las partículas elementales". algo que no venga de ningún sitio y que arrase con lo que haya. pero mientras el sistema siga así, el pan que compro paga(aunque en pequeña parte) al agricultor, a la cooperativa, al transportista, a la panificadora, a la empresa de limpieza de la panificadora, a la empresa que distribuye el pan, al super o panadería que lo vende. que sería más fácil hacerme yo el mismo el pan? Si. Pero hay mucha gente que vive del pan. Por ejemplo.
creo en el consumo responsable, pero hasta que el sistema no cambie, hasta que yo no tenga que pagar a una inmobiliaria 500euros por "gastos de gestión" o 2e por un café, las cosas no mejorarán.
el pesimismo es una constante cuando hablo de medioambiente. y mira que aquí reciclamos en 5 tipos de basura diferente, pero aún si no creo que sea bastante.
todo está montado de una manera en la que dificulta mucho la salida a ninguna parte.
no creo que viva esa re-evolución. la pataleta pueda que sea la única salida.
bss
j
ps1
me ha chirriado algo de los tóxicos...ya sabes, deformación profesional. te aburriría contando batallitas laborales ;)
ps2. las células fotovoltaicas de los huertos solares, se hacen de productos químicos y el futuro es hacerlas con nanomateriales cuyo riesgo en su fabricación no está nada probado,...es muy difícil no depender de la química y hacer un mundo limpio con este tipo de idea global sobre la civilización.
ps3. tampoco sé si es muy cierto lo de los tacones, ¿lo es?
ps4. sí lo es en la tecnología. no eres nadie si no tienes una blackberry o un iphone!!
No creo que se trate tanto de dejar de consumir cosas básicas como dejar de consumir cantidades ridiculas de cosas que no necesitamos al ritmo desproporcionado en el que lo estamos haciendo. Comemos más de lo que necesitamos en el sentido de que compramos cosas que no comemos (o que tenemos que tragarnos para que no se caduquen, como el pan de molde que siempre se caduca en mi casa porque sólo lo consumo yo). Hay productos que están pensados para ser derrochados.
ReplyDeleteNo necesitamos que nuestra casa esté a 25º en iniverno. No necesitamos pasarnos 15 minutos bajo la ducha. No necesitamos compranos todas las novelas que queremos leer (la biblioteca existe y el mangoneo a los friends, también). No necesitamos cambiar de ordenador o coche cada 2 años. No necesitamos ir en coche a la ciudad. No necesitamos comprar productos hiper-empaquetados importados de China cuando podemos comprarnos producros locales con mucho menos embalaje. No necesitamos comer carne todos los días con el gasto económico y medioambiental que eso supone (atención que por una vez no he hablado de ética). Y como esto, muchas cosas más.
No necesito una blackberry o un iphone. No seré nadie entonces. Necesito un móvil que mande sms y haga llamadas y lo necesito cuando el que tenga no funcione, no porque mi modelo se haya pasado de moda.
La moda se encarga de sacar productos parecidos a los que se llevaban la temporada anterior, pero con alguna diferencia para que se note que son de nueva temporada. Las rebecas de esta primavera, por ejemplo, se abrochan por arriba, las antiguas tienen cuello en forma de pico y se abrochan en el pecho. Y las botas, si no tienen tacones distintos, tienen algún otro detalle que las haga novedosas. Siempre se nota cuando algo acaba de salir del horno.
No necesito comprarme unas botas nuevas cada temporada, como tampoco necesito muchas otras cosas que acaban de salir y están de moda. Hay que comprar con criterio, pensando qué nos mueve a consumir uno u otro producto.
Puede que el mundo no cambie si optaramos por el consumo responsable, puede que boicotear los produtos tóxicos no sirva de nada, pero, simplemente si nos lo planteáramos si realmente necesitamos lo que compramos antes de sacar la tarjeta, cambiarían muchas cosas.
Al leer este post y los comentarios, se me antoja cada vez coger tres bartulos a mis gatillos e irme a vivir a lo alto de una montaña, plantar un huerto... y vivir...
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